Un gran vino que nos aporta en nariz y en boca fruta tropical muy madura y pequeños toques cítricos. Su fermentación en barrica de roble francés le confiere notas ligeramente tostadas, combinadas mágicamente con los toques lácticos, otorgando a este vino de una cremosidad y volumen inolvidables.
Excelente con pescado, sobre todo en el horno, marisco, arroces, frutos secos y quesos azules y de cabra.